La lectoescritura son dos proceso diferentes que se van desarrollando paralelamente: la lectura, donde el niño adquiere los conocimientos de las letras, los fonemas, sílabas, palabras, etc y la escritura cuando el niño realiza las representaciones gráficas de aquellos sonidos y/o letras que va conociendo. Si bien es cierto que la lectoescritura o la alfabetización convencional donde el niño ya se encuentre maduro para leer y escribir es a los 6 años aproximadamente, estos proceso se inician desde muy temprana edad.
Desde que el niño ya es capaz de agarrar o coger un plumón, pincel, o crayola y empieza hacer sus grabatos, sus trazos libres, representaciones de sus vivencias etc se inicia el proceso de la escritura el cual va pasando por diferentes etapas de acuerdo al ritmo de aprendizaje y madurez de cada niño. Dentro de la estimulación de la escritura estan las actividades de grafismos o la grafomotricidad que estan destinadas a desarrollar la precisión, coordinación, rapidez, distensión y control de los movimientos finos (movimientos y control de la mano) no se trata de ejercicios repetitivos. Los ejercicios de grafismos a veces resulta tediosos y aburrido para los niños por eso debemos brindandole al niño actividades lúdicas, motivadoras, y significativas, donde trace, y ejercite su mano.
Con creatividad podemos presentarle los grafismos de manera divertida. Comparto algunos grafismos que trabajamos con Abigail, trazando lineas rectas, curvas ondeadas, espirales, aspas, figuras, etc de manera creativa y motivadora.