El conteo es todo un proceso de abstracción que a veces confundimos con la recitación de los números de forma memorística, si bien es cierto que esto es base para llegar a saber contar aún no lo es. Para que el niño haya alcanzado este proceso debemos darle o exponerlo a ciertas estrategias, herramientas y/o actividades donde desarrolle los principios de conteo.
Según Piaget, el niño de Ed. Infantil no sabe contar aunque conoce de memoria los números. El niño debe desarrollar un serie de principios para saber contar:
– P. de correspondencia de uno a uno
– P de abstracción
– P. de orden estable
– P. de irrelevancia del orden
– P. de cardinalidad
A los 2 años asigna un número a cada objeto, correspondencia uno a uno.
A los 3 años aplica el p. de abstracción ya que cuenta juguetes, frutas, galletas etc.
A los 4 años aplica el principio de orden estable al contar los objetos de manera ordenada osea no omite o se saltea ningún numeral.
A los 5 años aplica el principio de irrelevancia del orden al reconocer que el orden en que se cuente los elementos no influyen en la cantidad de estos, y por último, p. de cardinalidad donde el niño tiene la noción que último numeral al contar un grupo de elementos es el que representa al conjunto. Estas edades son aproximaciones, el niño los puede adquirir antes o después según su ritmo de aprendizaje y/o madurez
Luego de todo este proceso podremos decir que el niño ya sabe contar. Para apoyar en esto he realizado una estrategia sencilla y con material de reciclaje, para que el niño refuerce el conteo. Imprimí un naranjo (árbol de la naranja), recorte aros de los tubos del papel higiénico como se ve en el video, los pegué en la imágen, dentro de los aros coloque números. Luego pegué círculos de cartulina anaranjada en las tapas ( yo no tenía tapas anaranjadas por eso adapté las rojas) y les dibuje puntos. El niño debe contar los puntos, relacionar la cantidad con el número y colocar la tapa donde corresponda simulando que coloca las naranjas.